viernes, 5 de diciembre de 2008

Lugares comunes: Pasos de cebra.



Cierra los ojos y respira hondo. Se le llenan de marrones, grises y ciudad los pulmones. La pituitaria se le excita al olor de las castañas asadas del puesto de la avenida y el frío, polar, afilado, le hace escarcha en los ojos. Mientras espera la señal precisa, sube la cremallera de su cazadora, se cala la gorrilla y se siente comulgar con sus compañeros de la línea de salida.
El otoño ha esparcido de lucecitas los árboles y las noches, y se difuminan al final de la avenida entre tanto coche, autobuses, humo y ciclistas invisibles bajo sus bufandas infinitas. 
Al otro lado, en la otra acera, solo se ven cuellos alzados de abrigos, guantes y paraguas a punto de abrirse. Alguna sonrisa. Muchas bolsas. Unas botas katiuskas con gabardina. Dos perros con abrigo y un bisón con collar de perlas. Gente mirando el reloj. Un niño con mochila y gorro. Dos abuelos con sombrero y tantas arrugas como años.
Al fin la señal, el disparo de salida, semáforo-verde-peatón, y todos se lanzan a por él, entregándose a su encarcelamiento en blanco y negro, como personajes de Bergman. Entre todos ellos, él recorre lentamente el código de barras urbano, buscando miradas, sintiendo el tráfico humano, esquivando bolsas, codos y un carrito de bebé sin bebé. La señal verde empieza a parpadear, aprieta el paso y, de repente, encuentra la acera bajo sus pies. Entonces mira hacia atrás, sonríe, cierra de nuevo los ojos y vuelve a respirar hondo. Siente algo recorrerle las piernas, los dedos, las mejillas y las llamadas perdidas del móvil.
Debe ser el Otoño, piensa, o quizás la emoción de los pasos de cebra.

A.B.... casi terminando las vacaciones.

4 comentarios:

ADA dijo...

me quede embobada mirando el paso de cebra y llegue tarde a tu cumpleaños!
Felicidades con retraso!!!

Ciudadano B dijo...

Gracias Ada y bienvenida. Nunca es tarde, si la dicha...

Saludos!!

Anónimo dijo...

Todos los años años lo mismo...todos los años las misma quejas, todos los años los preparativos parecen que empiezan antes, todos los años decimos que no nos gusta el invierno.... pero todos los años lo sentimos diferente y con las mismas cosquillas en la barriga de siempre....
Compañero ese también es mi paso de cebra, el de la avenida barcelona.
Un beso

Ciudadano B dijo...

Quizá ese sea tu paso de cebra o quizá, simplemente, seas tú el protagonista del post.

Sea como sea, no sabes cuánto me alegra leerte por aquí.

Besos para ti también. Ya sabes, en el sobaco.