lunes, 30 de septiembre de 2013

Cosmopoética 10

Podría parecer que el post anterior lo escribí conociendo ya las noticias que os traigo en éste, que la guerra a la que me refería era, precisamente, la que traen estas buenas nuevas, si bien, mis más íntimos ya saben que esa guerra va por otros derroteros, aunque sin duda tiene mucho que ver con la poesía.

Hoy os traigo tres pequeñas noticias que el Ciudadano B ha recibido en los últimos días y que tienen mucho que ver con este blog-ciudad que paseamos juntos habitualmente. Las tres tienen que ver con el encuentro de poetas del mundo que desde el 23 de Septiembre y hasta el 6 de Octubre se da en Córdoba (ya desde hace 10 años) y que se conoce como Cosmopoética. Pues bien: Ciudadano B aporta su pequeño grano de arena al evento. En concreto, los siguientes tres granos [granitos] de arena:

- Cosmoanónimos: el tuit enviado a dicha sección ha sido seleccionado por el jurado para formar parte del libro que editan cada año y que el pasado sábado 28 de Septiembre se presentó en la Sala Orive de Córdoba. Podéis leer la información completa aquí. Os adjunto el tuit elegido, que forma parte del poema "Encefalograma", publicado completo en este blog, aquí.


- Flash bus (Dinamopoética): mi poema "Línea 7" será leído e interpretado por una actriz en un autobús de Aucorsa (empresa pública de transporte urbano de Córdoba) el próximo día 3 de Octubre, iniciando su recorrido en Plaza de Colón en horario de 12 a 14 h y de 18 a 20 h. La iniciativa, promovida por la Casa de la Juventud, incluye el reparto de tarjetas con el texto del poema en sus instalaciones. 

- Poemas animados (Dinamopoética): también se podrá ver mi poema "El auto-stop definitivo" expuesto en algún cartel distribuido por la ciudad con motivo de dicha iniciativa que inicialmente contaba con la interpretación en plazas y calles y que, por retrasos en la organización, les ha sido imposible realizar. Tanto este como el anterior, forman parte del primer poemario, nacido precisamente con el espíritu del blog, titulado "El habitante deshabitado".

Precisamente este año, que por causas mayores que llevan mi nombre, no puedo asistir a ninguno de los eventos programados, precisamente este año, Ciudadano B está presente al borde afilado de los versos y es algo que me ilusiona compartir con vosotros, al otro lado de las wifis y los tarifas planas. Me alegrará saber que alguno de vosotros podrá verlos y sentirlos in situ.

Saludos cósmicos.


domingo, 22 de septiembre de 2013

Los otoños

Este otoño va a dar mucha guerra. Los otoños suelen darla. Y éste más aún.


Foto: Otoño en NYC (Ciudadano B, Noviembre 2011)


Mi escritorio, un arsenal de bolígrafos, libretas y armas de creación masiva, siempre dispuestos para la guerra. Adoro los otoños, esas estaciones de trenes lentos y maletas de nostalgia, el olor de las noches sin estrellas, el dolor puntiagudo de los atardeceres tempranos, a deshora, con aire de lluvia que nunca cae. A este otoño se le caerán todas las hojas por el peso de las palabras en ellas escritas. Las historias cubrirán las aceras y los parques, los niños destrozarán la alfombra ocre a patadas, levantando la memoria y los proyectos al viento fresco de la mañana.

Confío en que mi gran proyecto me deje compaginar el resto. Porque dará mucha guerra; este otoño estallará en cualquier momento y el tiempo de aunar esfuerzos, noches en vela y rutinas inexpertas llegará con él.

Hace muchísimo tiempo me prometí a mí mismo no abandonar mis proyectos. Cada día me lo prometo y quiero seguir luchando por cumplir mi promesa. Este otoño dará guerra y yo, en primera línea de batalla, dispuesto a disfrutar de esta guerra haciendo uso de mis mejores armas. 

Por otro lado, mañana comienza Cosmopoética -su décima edición- en Córdoba. Ni a una ni a la otra las disfrutaré estos días.

La poesía, para mí, esta vez, estará en otro lugar. Quizá en este otoño y en su guerra particular. Quizá entre mis manos.

miércoles, 4 de septiembre de 2013

Otra excusa

Pasaba la facultad de Derecho, tomaba Barrionuevo, atravesaba el Tinte para llegar al río. Pedaleaba despacio, el viento en la nariz. Eran las ocho y media de la mañana. La Ribera, a esas horas, era una bocanada de aire fresco. En el walkman –porque aún había walkmans – I’m born again. In an interstellar burst, I am back to save the universe. Río abajo, la ausencia de Miraflores, el reinado de los ojos romanos, observando, envejecidos, el paso de las aguas revueltas. La albolafia, serena, inmóvil, a la espera de alguna crecida… Después, la cuesta del Botánico; a la derecha, el Zoológico, aún por resucitar. La bicicleta agradecía el fin del trayecto.

Yo

no.


Ir a la facultad era entonces –tan entonces –otra excusa –innecesaria –para recorrerte.

Obra de Manuel Castillero
http://manuelcastillero.com/artista.php