martes, 11 de noviembre de 2008

Lugares comunes: las calles (II)

Aquella mañana la niebla había devorado la ciudad. Sin embargo, la calzada ofrecía líneas contínuas para no perderse y el wolkswagen golf del 2003 se conocía el camino.  De vez en cuando un semáforo en rojo le ofrecía unos segundos para tomar aire, podrido y denso, gris, y retomaba la marcha entre ruido de motores, algún claxon y viandantes con el paso pesado de aquel que acaba de despertarse. Miraba los edificios en los que algunas ventanas levantaban sus persianas con la intención de eliminar las legañas mañaneras, regar las macetas y observar con cierto detenimiento el cielo, hoy inexistente, repleto de una lluvia que aún era sólo una posibilidad. Las luces encendidas dentro de los bloques de viviendas le hacían adivinar las rutinas interiores de desayuno con tostadas, de duchas de agua caliente o, tal vez, de siempre llegar tarde.

El tráfico era siempre el mismo en el Vial Norte. A veces coincidía en el carril de al lado con un rostro conocido por haber compartido atasco anteriormente; entonces el saludo era casi indetectable, una mueca apenas, en ocasiones de fastidio, otras de resignación.

Después aparcamiento cerca de la Diputación Provincial y paseo por el parque de camino a la responsabilidad del empleo estable, indefinido, oficina, ordenador. Las palomas duermen en los árboles, los vagabundos en los bancos. Los barrenderos coleccionan hojas aderezadas con tierra y en la fuente siempre flota un tapón de coca-cola. Colón siempre estuvo ahí, tanto para los que están de paso como para los que se quedan.

Él lo atravesaba de punta a punta, prometiéndose volver una tarde con más tiempo. Cruzaba un semáforo que siempre estaba rojo-peatón, compraba el periódico en el kiosko de la esquina y, acto seguido, se adentraba en Tejares con el paso firme pero sin la voluntad necesaria.

Poco después su destino se transformaba en un edificio sin color. Ocho y media de la mañana.


A.B.... paseando con los ojos cerrados.

Foto: José Mariscal (Panoramio, Google Earth)

2 comentarios:

Ve. dijo...

Un día si quieres hacemos un cambio de vecinos.


:)

Maria dijo...

Colón es un lugar extraño de donde salen muchas palomas, también muchos autobuses. no se yo si tendrá alguna relación.

gran descubrimiento tu blog.